OH MY GOD
99 Minutos en el Cielo (2009)
La "Opera prima" documental del estadounidense Peter Rodger quien se dedicó unos meses a recorrer el mundo buscando la respuesta a la pregunta universal: ¿Qué es Dios? El tema se ha tratado de abordar en el cine por diversas personalidades tanto en ficción como en documental. En éste género recuerdo la fallida y exasperante Religulous (2008), la cual, trataba vanamente de burlarse, por medio de la edición y las inútiles intervenciones del director, de los diversos líderes religiosos. Al contrario de esa obra, Oh my God muestra de una manera más objetiva las opiniones y creencias de las personas alrededor del mundo.
Sin embargo, no podemos decir que el filme es completamente objetivo. Las entrevistas entrelazadas dinámicamente por la edición son interrumpidas por la opinión del director. Mas estas intervenciones parecieran ser parte esencial del documental. Peter Rodger, al igual que los entrevistados, expresa su incertidumbre, duda o fe en algo mientras avanza el documental. Sus aportaciones sirven como hilo conductor a través de un lugar donde nadie tiene la respuesta correcta, pero nadie duda en dar su creencia personal. Cada aportación es acompañada por una hermosa fotografía. Ésta refuerza las opiniones de los entrevistados o los contradice, elaborando un debate interno en el espectador.
Uno de sus grandes defectos es la música. En algunos países como India el sonido tradicional es remplazado por bits electrónicos cuya finalidad es volver más atractivo para el público el filme. Sin embargo se pierde el misticismo dado por las respuestas y filosofía de los habitantes. Un gran reproche es cómo se representa a la cultura islámica al final. Al igual que Religulous se utilizan sonidos incidentales para resaltar una burla que rompe con el estilo y tono formal del documental. Así mismo uno de los momentos más contradictorios es cuando sale México. Junto con las imágenes de la Villa, peregrinaciones, tributos a la Virgen y una entrevista a un "volador" salen jóvenes juniors dando su opinión. Si, tal vez es mi yo clasista, pero esos muchachos no son la opinión de un pueblo. ¿porqué no siguió su linea narrativa como en India o Japón?
Al final, Oh my God es un documental bien realizado. Resalta una grandiosa edición, la búsqueda de personajes que aportan la opinión general del país y una hermosa fotografía. Esta bien la ausencia de conclusiones. Nadie puede hablar por el mundo acerca de algo tan espiritual y personal. El director se queda con tres ideas: Dios es naturaleza, amor y esta en todos nosotros. Una buena opción en cartelera que puede dejar algo en el espectador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario