2.9.10

CINE EN INTERNET Lord of the Flies

LORD OF THE FLIES
1967


Una película de Peter Brook basado en la magnífica novela de William Golding. Esta película, hecha en blanco y negro, fue la primera que adaptó de manera fiel el libro. Éste nos habla de unos niños que sobreviven a un accidente aéreo en una isla. Sin adultos que los limiten, crean una sociedad muy parecida adulta donde los impulsos, ideas y metas de dos muchachos se contraponen dando paso a la locura infantil sin reglas ni limitaciones.

No me agrada comparar las obras literarias con los filmes. Son un lenguaje muy distinto y a veces hay que hacer ciertos cambios en la trama para que la cinta avance correctamente. Sin embargo hay un aspecto que, probablemente por la época, no se pudo capturar muy bien. Conforme avanza la trama en el libro la trama se vuelve más perversa. Nuestro héroe es absorbido por el frenetismo y la exitación juvenil llevando a varios sucesos que destrozarán su persona. En la película esta locura es captada con pausas y elipsis que no estoy segura que ayuden. Además, ciertas cosas como el fuego en el bosque o el monstruo de la colina son demasiado vago o demasiado explícitos; quitando entendimiento y expectativa a la trama. Hay que tener en cuenta: en los años 60's no se acostumbraba el ritmo acelerado de hoy en día, probablemente en su época se sentía más la tensión por medio de las pausas. El director insinúa que le importa menos la crítica social y más el personaje.

A pesar de lo anterior estamos ante una excelente película donde la naturaleza humana es mostrada sin miramientos. La fotografía es en planos abiertos o muy cerrados en los personajes. A veces se sienten las tomas un poco sucias, las cuales, le da un aire de salvajismo y de no tener reglas. La actuación de los niños se siente fluida y caótica; resaltan perfectamente las situaciones de incertidumbre y juego. La trama avanza rápidamente presentándonos a los personajes necesarios y olvidando a los de relleno. Mas empatizamos con todos; no sólo los líderes Ralph y Jack, sino con los obedientes miembros del coro y los sumisos niños de 9 años.

Tanto la película como el libro son un experimento. ¿Qué pasaría si un grupo de niños "inocentes" conviven libremente, sin reglas, lejos del mundo adulto? ¿Qué clase de sociedad formarían? ¿Habría justicia? Puede ser que la respuesta no le agrade a nuestro pensamiento utópico; probablemente la naturaleza humana siempre será caótica, no importa la edad o el lugar.

UNA PEQUEÑA REFLEXIÓN DE LA PELÍCULA

En la actualidad nuestra concepción de la infancia es muy diferente a la que, hace muchas décadas, se tenía. Sin embargo siempre se ha pensado de los niños y niñas como criaturas de pureza e inocencia. Seres que no han sido tocados por la corrupción y maldad de la mente adulta; personas que representan un pizarrón blanco donde el adulto puede ir escribiendo y moldeando la personalidad.

Muchas personas se han preguntado que pasaría si dejamos a estos pequeños, de edad inocente, en libertad. ¿En su ingenuidad crearían una sociedad pura o simplemente la crueldad surgiría de ellos confirmando la verdadera naturaleza humana? ¿A qué edad la idea de jerarquía, poder y locura ya es comprendida y analizada por sus cabezas? En mi opinión la capacidad de razonamiento infantil es subestimada por los adultos; ellos comprenden lo que sucede a su alrededor rápida y ágilmente.

No por nada el escritor William Golding y el director Peter Brook nos presentan, desde un comienzo, jerarquías de poder. Están los niños del coro y los demás. El niño sensato y prudente es el típico perdedor; los dos líderes muestran cualidades como la prudencia y la insensatez; los demás son rebaño. Muy pronto se darán cuenta, dependiendo de su educación y conciencia, como administrar el poder y lo que éste puede ocasionar.

Conforme avanza el filme podemos notar que la tendencia de la naturaleza humana es hacia el caos y el desorden. ¿Quién no quiere divertirse todo el tiempo y comer sin limitaciones y reglas? El salvajismo en su máxima expresión. Muchos dirán para entender la cinta una excusa perfecta: son niños, no adultos. Sin embargo, ¿no estamos jugando a lo mismo con un mayor número de personas y destinos? Siempre tendremos nuestros monstruos (la muerte en la cinta) y nuestros sueños (el rescate) que serán ayudados o impedidos por el prójimo. ¿Será posible que la inocencia infantil no se transforme en aquellos seres que “por miedo” y no por excitación de un grupo de personas matan al único ser puro? ¿Será posible que la prudencia y la justicia sea aplastada por una piedra?

Al final, en el libro y un poco menos dramático en la película, el marinero le pregunta a nuestro personaje principal si se encontraba jugando, él se rompe a llorar. ¿Cuando dejaremos de jugar con la vida de los demás resguardando nuestro salvajismo interno? Probablemente me desvié un poco del tema de la infancia pero, finalmente, de eso trata: de aprender, absorber y asimilar los conocimientos del mundo adulto mientras interpretan “inocentemente” un juego de poder.


1 comentario:

jjj dijo...

Esta peli tiene más puntos a reflexionar, pero la de los 90s para mí es mucho más cruda y creo que me gusta un poco más que esta.